Un grupo de empleados de Google están acusando al emporio tecnológicode crear herramientas para espiarlos, llamado como “herramienta de vigilancia interna” que según sus declaraciones monitoreaban las reuniones en donde se encontraban más de 100 personas, esto con la intención de sabotear planes de protestas.
De acuerdo a las declaraciones de un empleado anónimo de la misma empresa, se creó esta herramienta como una extensión del navegador web Chrome, misma que se instalaba de manera automática en todos los ordenadores de la compañía sin ningún tipo de autorización por parte de los empleados.
Ellos argumentan que se están violando sus derechos a la privacidad, ya que esta extensión notificaba a los ejecutivos de la compañía de los eventos con más de 100 personas fuera del calendario.
La empresa de sede en Estados Unidos ha negado rotundamente todo acerca de este caso.