Copiar en un examen es un acto que se puede considerar “normal” en las aulas de las escuelas, sin embargo, existen países del mundo donde hacerlo se considera un delito que se paga con cárcel.
Países como Bangladesh, Egipto, China y Taiwán han implementado sanciones que van desde lo económico hasta la retención del estudiante, así como antecedentes penales permanentes.
A partir de los 15 años de edad, los estudiantes pueden ser aprehendidos por infringir esta ley.
En Taiwán, Egipto y China, cometer este delito es causa de cárcel. Podrías pagar una multa de hasta 45.00 euros y pasar de dos a siete años en prisión.
La causa de estas sanciones en China es por el gaokao, un examen de selección conocido por ser uno de los más difíciles del mundo. El contenido de esta prueba se considera secreto del estado.