Especialistas de la salud explican que la anemia es la baja producción de hemoglobina, partícula que oxigena los tejidos del cuerpo.
La principal causa del desarrollo de una anemia es por una inadecuada alimentación o por una hemorragia secundaria.
¿Cómo detectarla?
Hay signos universales que muestran la presencia de anemia, así como datos clínicos específicos, tales como:
- dolor de cabeza
- mareo
- cansancio
- debilidad
- palidez o pérdida de color de la piel
Sin embargo, la anemia aguda produce otros síntomas más como:
- taquicardia
- síncope (pérdida brusca y temporal del conocimiento)
- cefalea
- vértigo
- disnea (dificultad para respirar)
- taquipnea (aumento de la frecuencia respiratoria)
Al respecto, quienes presenten un cuadro con estos síntomas deben someterse a un estudio de biometría hemática para medir la calidad de su sangre y evaluar si la médula ósea está produciendo suficientes glóbulos rojos.
En casos de desnutrición es más frecuente la presencia de anemia, así como en personas que padecen diabetes, cáncer y en mujeres con alteraciones en el ciclo menstrual.
¿Cómo prevenirla?
- Consumir alimentos ricos en hierro como frutas y semillas (pasas secas, almendras y cacahuates).
- vegetales
- granos y cereales (frijoles, brócoli, espinaca, lentejas)
- carne roja
- pescado
- huevo
- lácteos
Es importante señalar que ante la presencia de anemia, se evite la automedicación por medio de complementos vitamínicos sin la supervisión de un especialista.
