Un reciente estudio revelado por científicos de la Universidad de Stanford y la Universidad Tecnológica de Nanyang, en Singapur, ha identificado dos etapas cruciales en el envejecimiento humano: a los 44 y 60 años.
Según la investigación, publicada en Nature Aging, estos momentos marcan ráfagas de envejecimiento acelerado a nivel molecular.
Durante el estudio, que siguió a 108 participantes de entre 25 y 75 años, se analizaron cambios en el ARN, proteínas y microbioma.
Los hallazgos indican que el envejecimiento no es un proceso gradual, sino que se intensifica en estos dos periodos clave, afectando funciones como el metabolismo de la cafeína y el alcohol, así como la salud muscular y cardiovascular.
El profesor Xiaotao Shen explicó que estos descubrimientos subrayan la importancia de realizar ajustes en el estilo de vida, como reducir el consumo de alcohol y aumentar la actividad física, al acercarse a los 40 y 60 años.
Además, el estudio destaca la necesidad de monitorear la salud renal y el consumo de carbohidratos a partir de los 60.
