En el municipio de Comondú, Baja California Sur, se dio una peculiar e interesante escena en un panteón local ya que una camioneta Chevrolet Colorado 2005 fue enterrada junto a su dueño.
La última voluntad del hombre fue ser sepultado junto a su automóvil de carga que le fue regalado por su hijo.
Los sepultureros tuvieron que hacer una gran fosa, revestida con bloques y cemento, para después bajar la camioneta con una grúa, misma que contenía el féretro del dueño en la caja de carga.
Familiares y amigos del hombre fallecido aseguraron que este amaba su camioneta, la cual ya no podía usar en últimas fechas debido a los problemas de salud que le quitaron la vida.