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“De repente sentí algo en la llanta del auto”… lo intentaban asaltar

Mario Escalona viajaba junto a un compañero de trabajo sobre la carretera La Pera – Cuautla, habían salido tarde de una reunión en el municipio de Cuautla y decidieron tomar camino pasadas las 10 de la noche. Todo el camino estuvo prácticamente solo, pocos carros y algunos tráileres que circulaban en sentido hacia Cuautla. Julio, compañero de Mario, había menciona que quería pasar por unos tacos a Lomas de Cortés, Mario accedió y aceleraron el paso.

Pagaron sin ningún problema la caseta de Tepoztlán; todo iba bien en el camino, hasta que de pronto, sintieron un ruido extraño en la camioneta. Asustados por lo oscuro y vacío del camino decidieron seguir su marcha, pero algo no andaba bien.

“Sentimos como cuando pasas por encima de algo, pero no quisimos detener el camino porque anteriormente un conocido ya le había pasado algo similar y lo intentaron secuestrar en la misma zona. Seguimos adelante y afortunadamente en el entronque había un policía federal que nos auxilió. La llanta sí estaba ya ponchada y hasta el rin se dañó. Afortunadamente estamos bien”

La anterior historia sucedió en enero de 2016.  Estos hechos no han sido aislados en Morelos, han sucedido varias veces en la zona norte y oriente de la entidad. Otros casos se han presentado en el tramo de Amecameca a Cuautla, y siempre es el mismo modus operandi.

Recientemente un usuario reportó que en el tramo de Oacalco – Oaxtepec encontró un artefacto que se había clavado en su salpicadera. Era para ponchar las llantas y afortunadamente no pasó a mayores.

Los invitamos a tomar las debidas precauciones y en la medida de lo posible evitar circular por carreteras solitarias como en Lagunas de Zempoala o Huitzilac.

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