Las imágenes de fichas de búsqueda de mujeres y niñas desaparecidas, ha sido una constante en los últimos días en todo el país.
En México, ser mujer se ha vuelto un peligro y ya no solo debemos cuidarnos de no andar solas, de no vestir de cierta manera, sino que ya debemos protegernos hasta de salir a buscar trabajo o de ir a la papelería a comprar artículos escolares.
Todo esto porque nuestras autoridades no han sido capaces de crear políticas públicas y estrategias eficaces para combatir la violencia de género y en específico la violencia feminicida.
Y es que ¿cómo obligar a las autoridades a actuar ante esta problemática si hasta los mismos ciudadanos condenan actos de protesta, como las marchas del 8 de marzo, donde se reprocha el daño a paredes, edificios, monumentos…cuando a las que están matando son a nuestras hermanas?
El incendio del Palacio de Gobierno de Nuevo León, son gritos desesperados de madres que buscan a sus hijas desaparecidas; de mujeres y hombres que buscan a sus madres, hermanas, tías, primas…y quienes desaparecen ante el silencio y condena de toda una sociedad.
De acuerdo al Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas refieren que en lo que va del 2022, se han registrado 275 casos.
En Morelos, recientemente padecimos la desaparición de Evelyn, una joven de 22 años de edad, quien fue localizada sin vida, después de haber acudido a una entrevista de trabajo.
El rostro de su presunto agresor, ya fue difundido en medios nacionales, sin que hasta este momento haya sido localizado y detenido.
En redes sociales, también se difundió lo que aparentemente es el traslado del cuerpo de Evelyn, cercenado, al interior de bolsas de plástico, tal como fue encontrada a la orilla de una barranca.
Otro caso que conmocionó al país entero, fue el de la pequeña Victoria, una niña de apenas seis años de edad, quien salió de su casa para ir a la papelería por artículos escolares; la menor fue encontrada sin vida horas después; el reporte de la Fiscalía de Querétaro revela que la causa de muerte fue por asfixia y presentaba señas de agresiones sexuales.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) presentó el informe derivado de la visita realizada a México en 2021 por el Comité Contra las Desapariciones Forzadas.
Las cifras oficiales muestran un aumento notable de las desapariciones de niños y niñas a partir de los 12 años, así como de adolescentes y mujeres, tendencia que se agudizó en el contexto de la pandemia de la enfermedad por coronavirus.
Dichas desapariciones tendrían como objeto ocultar la violencia sexual, el feminicidio, la trata y la explotación sexual, aclaró Carmen Rosa Villa Quintana, miembro del Comité.
En Nuevo León, esta problemática se agudizó; en el último mes se ha reportado la desaparición de 15 mujeres, mientras que una de ellas fue hallada muerta.
Esto causó la indignación de la ciudadanía y las familias de las mujeres desaparecidas lo que derivó en el incendio del Palacio de Gobierno, como medida para exigir acciones y justicia.
El gobierno del estado mexicano de Nuevo León decretó este miércoles “acciones urgentes y extraordinarias” para la búsqueda de desaparecidas y atención a los feminicidios.
Además, en un documento emitido el pasado 11 de abril y publicado este martes en la página oficial del Gobierno estatal, se anunció la decisión de “formar un grupo especial” para atender estos crímenes.
El decreto emitido por el gobernador Samuel García añadió que se aumentó el actual Grupo de Búsqueda de la Fiscalía a 200 efectivos que realizarán esa tarea.
Pero esto no corresponde a medidas nuevas para atender la problemática, sino que se trata del protocolo Alba y el cual, el gobernador Samuel García, nuevamente está utilizando ganar popularidad, tal como lo hizo con el caso de Marifer, otra chica desaparecida y encontrada muerta en Nuevo León.
El panorama, lo hemos dicho incontables veces, es desolador para las mujeres y se complica aun más ante la inacción de los gobiernos, a quienes debemos responsabilizar de las desapariciones y muertes de mujeres, quienes a veces solo salen a buscar trabajo, van a la tienda o buscan sobrevivir.
