Por: Luis Reinoso
Luis Mateo López Balanzar, nacido el 6 de Octubre del 2013 en Cuernavaca, Morelos, dice que sus logros se deben en gran parte a su padre, Celso Luis López, quien es sin duda una de las personas quien lo ha impulsado a jugar el deporte más hermoso del mundo: el fútbol.
Mateo empezó jugando a los cuatro años en VENADOS FC y a la fecha sigue jugando en ese gran equipo, cuyo objetivo es formar jugadores (niños) integrales, es decir, responsables, disciplinados, empáticos, que sepan trabajar en equipo, pero sobre todo, que sean felices y que luchen siempre por sus sueños.
“El fútbol no es difícil, para mí los entrenamientos y partidos son lo más padre de la semana por que puedo disfrutar con mis amigos”, dice Mateito emocionado. ¡Y cómo no, si tanto sus compañeros de equipo y entrenadores, como los equipos y entrenadores rivales, no se cansan de halagarlo! “Es un goleador letal dentro del área rival”, comentan las personas que lo ven jugar.
Mateo cree que no existe emoción más grande y satisfactoria que el ganar un partido con su equipo VENADOS FC ya que eso significa que el esfuerzo en los entrenamientos ha valido la pena.
Cuando le preguntamos a quien le dedica sus goles él dice que siempre se los dedica a toda su familia pero en especial a su papá y su hermano Luis Manuel; de quienes ha aprendido bastante y su mamá Jazmín; quien es su principal admiradora y porrista.
Estamos seguros de que las ganas de triunfo, el esfuerzo, la disciplina, el apoyo de su familia y de su equipo llevarán a Mateo López Balanzar a donde él desee llegar.
