Tras haber transcurrido un año desde el derrumbe en la colonia Los Pilares en Cuernavaca, el alcalde José Luis Urióstegui Salgado señaló que la problemática no ha podido resolverse. Durante estos 365 días, se han producido dos desprendimientos leves en el terreno, el cual se mantiene inestable.
La comuna ha habilitado un albergue en la colonia Chipitlán, pero desafortunadamente, las familias se resisten a abandonar sus viviendas.
El alcalde detalló que es necesario remover aproximadamente 400 tumbas para liberar el terreno y poder trabajar en él, dado su estado de inestabilidad.
"Hasta este momento, el derrumbe controlado parece ser la solución más práctica a corto plazo. No podremos llevar a cabo los trabajos hasta que logremos convencer a todos los familiares que tienen sepultados en el panteón de la Paz", expresó en una entrevista.
Aseguró que a través de Protección Civil del municipio y en coordinación con el estado, se mantiene una vigilancia permanente.
0:00
/
