El señor Mauro Hernández “N”, murió la tarde del pasado sábado en su domicilio de la calle vía del Ferrocarril de la colonia Patios de la Estación en Cuernavaca y desde entonces, su familia no lo ha podido sepultar.
El lugar que tenían para él en el panteón de “La Leona”, en la capital del estado, lo ocupó su hijo hace unos meses, debido a que falleció por un infarto y uno nuevo les cuesta 30 mil pesos.
Samuel Jaramillo Salgado, representante popular de la colonia, aseguró que el costo debería ser más bajo, pero el encargado de panteones en la ciudad lucra los lugares desde hace meses.
“En 2012 ya nos habíamos llevado un difunto con todo y ataúd al Centro de Cuernavaca para pedir que se le asignara un espacio y no queremos hacer lo mismo, pero sino nos resuelven, nos lo vamos a llevar otra vez al Centro”.
Mencionó que el responsable de esa área, ya ha engañando a varios ciudadanos haciéndoles creer que el costo por el traspaso de un lugar en el cementerio es de 30 mil pesos, cuando son espacios que están abandonados.
