El día de ayer, el Congreso aprobó la desaparición de la figura del fuero en la Ciudad de México, haciendo inválidos los artículos 6 y 31 de la Ley Orgánica del Congreso de la capital, los cuales regulaban la protección a diputados locales.
Con esto, la Constitución Política de la Ciudad de México, la cual entró en vigor el pasado 17 de septiembre, establece que las personas servidoras públicas son responsables de los delitos que realicen durante su mandato.