Una mujer, víctima de un “depredador” cibernético, como se les conoce de manera popular, relató que el pasado 20 de mayo, uno de sus más de 500 contactos en la red social Facebook, la contactó para “sextorcionarla”. Primero le mandó un mensaje en privado en la que le dijo que tenía en su poder toda su información personal, que presuntamente fue recabando poco a poco. Se la envió en un archivo y después, cuando ella lo corroboró, él le exigió que si no le mandaba fotos donde apareciera desnuda, iba a hacer pública su información. De inmediato llamó a la Policía local, pero le dijeron que no podían atenderla, pues esas amenazas no eran consideradas como un delito. Después llamó al 911 y obtuvo la misma respuesta, hasta que se comunicó con la Policía Federal y la canalizaron a una agencia de investigación cibernética en el Estado de México. Ella mantuvo el contacto con el “depredador” pero al final, las autoridades no pudieron ayudarla, debido que el hecho no es considerado aún como un delito.
Ignoran autoridades a víctima de “sextorsión”
