El Gobierno de Morelos no instalará vallas ni otras barreras en las inmediaciones del Palacio de Gobierno durante la marcha del 8 de marzo, a diferencia del Poder Judicial, que sí ha tomado medidas de resguardo.
Jorge Salazar Acosta, titular de la Secretaría de Administración, explicó que la instrucción de la gobernadora Margarita González Saravia es garantizar el derecho a la libre expresión de las mujeres que participarán en la movilización.
Por ello, no se colocarán estructuras metálicas o de madera que impidan el paso de las manifestantes.
El funcionario indicó que el único ajuste previo a la marcha será el retiro de pendones para evitar que interfieran con el desarrollo de la protesta.
“El ejercicio de los derechos por parte de la autoridad se cumple con respeto, y ese respeto implica una conducta de abstención, sin obstruir la libertad de expresión”, declaró Salazar Acosta.
En caso de que haya actos de iconoclasia, recordó que la administración anterior aplicó un material protector en la fachada del inmueble, por lo que, de ser necesario, se usará un gel especial para retirar las intervenciones.