Intensa jornada se vivió este domingo en la fecha 6 del torneo Clausura 2024 de la Liga MX, donde la afición no se quedó con ganas de goles, ya que hubo varias sorpresas en los encuentros, entre ellas, las humillantes derrotas de dos de los equipos más grandes del fútbol mexicano: los Pumas de la UNAM y las bicampeonas Águilas del América, cuyos aficionados, al parecer, se han quedado sin internet.
Sin embargo, el fútbol es así: unos celebran mientras otros se lamentan. Tal es el caso de la Máquina del Cruz Azul, quien consiguió una valiosa victoria, no solo por los 3 puntos que suma a su cuenta, sino porque su triunfo fue en el Clásico Joven sobre el América, por goleada 4-1, y con ello, asumió el liderato de la tabla general.
A pesar de que el América abrió el marcador al minuto 16 con un gol de Brian Rodríguez, los celestes no tardaron en reaccionar. Giorgos Giakoumakis empató el partido al 43', seguido por Ángel Sepúlveda, quien adelantó a Cruz Azul al inicio del segundo tiempo.
Tras entrar de cambio, Guty Gutiérrez anotó el tercer gol al 78' y, finalmente, Lorenzo Faravelli selló la goleada al 89', consiguiendo la victoria para su equipo en el Clásico Joven en el Estadio Ciudad de los Deportes.
Por su parte, en el duelo de felinos desarrollado en el Estadio Olímpico Universitario, los Pumas recibieron a los Tigres, ante la presencia de Rafa Márquez, quien observó el desempeño de los seleccionados por Javier Aguirre, de cara a los próximos encuentros de la selección nacional.
Sin embargo, lejos de lucirse, el equipo de la máxima casa de estudios de nuestro país cayó por un vergonzoso marcador de 3 goles a 1.
En el mismo caso que el América, los Pumas comenzaron arriba en el marcador por conducto de Rogelio Funes Mori al minuto 15; sin embargo, Jonathan Herrera empató el juego al minuto 37 y, apenas un par de minutos después, Fernando Gorriarán le dio la vuelta con un golazo al 39'.
Ya desconcentrados, el equipo azul y oro no soportó los embates de Tigres, y sería nuevamente Jonathan Herrera quien consiguió la anotación que sepultó cualquier esperanza universitaria de volver a empatar, tras un excelente cobro de tiro penal al minuto 59.