La señora Martina Palacios, lleva más de 40 años vendiendo flor de cempasúchil en el mercado Adolfo López Mateos de Cuernavaca; ella recuerda que cuando era muy joven, su padre le enseñó a escoger las mejores flores y todo lo que hay que saber para vender.
Ahora ya no está con ella, pero su legado no ha muerto, ella le enseña con el mismo entusiasmo a su hija, el legado para seguir con esa tradición. Durante estas fechas, compran montones de esta flor y terciopelo que es típico de la celebración de Día de Muertos.
“Siempre me ha gustado trabajar. Yo me acostumbré desde niña a vender la flor, y pues me acostumbré a vender. Sí, hubo épocas difíciles, pero hemos salido adelante. Ahorita nos cambiaron acá (mercado de las flores) porque antes vendíamos en los andenes allá abajo. Pero sí está llegando gente, no igual, pero sí estamos trabajando”, afirmó
El manojo de cempasúchil, Martina Palacios lo ofrece en 20 pesos, pero quienes buscan mayoreo lo vende en 3 manojos por 50 pesos y para aquellos que buscan uno grande lo ofrece en 30, al igual que las macetas.
Los precios están prácticamente igual que el año pasado, aunque su costo de producción sí se elevó en este 2024, pero afirmó que decidió mantener el precio, para que la gente pueda comprar para sus ofrendas.
“Nosotros no podemos dar más caro porque la gente, pues se va, entonces, pues tratamos de darlo económico, porque si lo damos caro, pues también no viene la gente y no compra, entonces tenemos que dar precio”, comentó.
Al mercadito de Día de Muertos, asisten habitantes de todas partes de la zona metropolitana de Cuernavaca, desde el pueblo de Santa María Ahuacatitlán, hasta vecinos de Jiutepec, Emiliano Zapata y Temixco.
A Martina Palacios le gustan mucho estas fechas, porque disfruta vender la flor que muchos acostumbran colocar en los altares, incluso ella, ya apartó algunas de las flores para el altar de su padre.