La Diócesis de Cuernavaca manejó con secrecía la desaparición del Obispo Emérito de Guerrero, Salvador Rangel Mendoza, así lo afirmó el director de asuntos religiosos de gobierno del estado.
Luis Héctor Herrera López explicó que la Comisión de Búsqueda Estatal estuvo informándole sobre el asunto, dado que el Obispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, le refirió que no podía comentar sobre el asunto.
El funcionario del estado comentó que la Diócesis de Cuernavaca no informa sobre los sucesos que puedan enfrentar los sacerdotes en Morelos.
Dijo que algunas veces se enteran de hechos por los comunicados que emiten como Comisión Espicopal Mexicana.
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Fuente: 24 Morelos
